“ LO QUE MÁS AMARGA A UN AMARGADO ES ;
NO PODER AMARGAR A LOS DEMAS “
Anónimo
La amargura suele ser en muchos casos una
persona se focaliza casi en exclusiva en el
mundo exterior. El mundo del amargado está
lleno de ventanas a través de las que ve solo
injusticia, desde donde gusta asomarse para
volcar su rencor, su melodía amarga y sus
sentimientos pesimistas. El amargado quiere
cautivos, pero también clama ayuda. La
amargura es una semilla que se siembra y
que no suele germinar al instante. Su
presencia, al principio, es silenciosa. Una
decepción duele, pero no nos cambia, dos
nos hacen pensar, pero cuando alguien
acumula demasiadas piedras en el camino
y hace una atribución claramente negativa
de su existencia, deja de sentir que tiene
control sobre su vida. Entonces las semillas
germinan… y nos enferman.
Recuerda: La persona que no está en paz consigo
misma estará en guerra con todo el mundo.
Feliz Día Nuevo
Namaste 🙏 🇲🇽
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